sábado, 30 de marzo de 2024

NO IMPORTA

 Foto: J.X.

Es cursi, ya lo sabía. Escribir sobre la muerte de un amor. Amar, ser amado. Es cursi. No importa.

Él era cursi, ya lo sabía. Era trágico. No importa.

Decía, por ejemplo:

No he sabido quererte.

Pero daría mi vida

para que vivieras.

Muero por ti,

para que te reencarnes

y sigas viviendo en mi muerte viva.


miércoles, 27 de marzo de 2024

COMO SI...

Foto: J.X.

Como si el autor quisiera dejar en el silencio todo aquello sobrevivido que no se puede contar..., abandonado a orillas de un río, entre los árboles, bajo el matorral donde guarda sus secretos el amor muerto. 



sábado, 23 de marzo de 2024

PEQUEÑA FLOR

 Foto: J.X.


Iba perdido de una calle a otra, sin saber cómo ni dónde podría esconder el tesoro de una muerte que llevaba dentro, cerca del alma, pero muy adentro de su corazón, que latía a un ritmo desbarajustado, cuya sangre amorosa era una pequeña flor, una de esas flores que sólo se ven cuando las pisas.


Nota. Poema en prosa escrito con música de Sidney Bechet y una frase de Juan Valera.



jueves, 21 de marzo de 2024

RAMAS DE ZARZA

 Foto: J.X.

“Soy menos que nada”, decía recordando una vieja canción, una ranchera.

“Menos que nada, sin ella, sin ti, soy menos que nada”, decía en la barra del bar, o cantaba otros versos de la misma canción modificándolos según el día, según la tristeza del día, explicaba él.

De pronto, cambiaba de palabras y se despedía a toda prisa. No disponía de más tiempo. Tenía una cita con la muerte, “que no admite excusas ni exculpaciones, y me azota con ramas de zarza”, añadía, y afirmando con la cabeza nos leía una nota, siempre la misma:

Arbusto de la familia de las rosáceas, espinoso, con tallos sarmentosos de cuatro a cinco metros de largo, con aguijones fuertes y con forma de gancho, de color verde oscuro y flores blancas o rosadas en racimos cuyo fruto es la zarzamora.”

Y salía corriendo del bar.





miércoles, 20 de marzo de 2024

LA CONFESIÓN DEL MALHECHOR ENAMORADO, MAL ENAMORADO

Foto: J.X. 

Confesaba que era culpable por fundir el amor y mezclarlo con visiones fraudulentas y convertirlo todo en joyas falsas de amor imposible.

Se declaraba culpable y se sometía al castigo de ser atormentado por un verdugo en el patio carcelario de los mal enamorados.

Tal era la breve confesión del delito imperdonable cometido por el malhechor enamorado, mal enamorado.


martes, 19 de marzo de 2024

UN MUNDO EN POCAS PALABRAS

 Foto: J.X.


Desde que había decidido no tener casa propia, su alma no podía olvidar todas las veces que su cuerpo había recorrido escaleras y pasillos arriba y abajo, en busca de los innumerables lavabos de aquella Asociación Cultural de Laberintos. 

Después de transitar de un “lavabo ocupado” a otro, al fin podía acceder a un “lavabo libre”. Luego, se dirigía a una sala solitaria a descansar, e imaginaba otro encuentro con ella. Otro encuentro imposible con la novia muerta.

sábado, 16 de marzo de 2024

LA CITA

 Foto: J.X.

En el bosque me hablan de ti. No has podido acudir a la cita, dicen.

No vendrás.

Esto me dicen en el bosque. Los pájaros y los animales escondidos, las ramas de los árboles, las flores, las plantas sin flores, los arbustos, los ríos, las piedras, el barro de los charcos, las sombras, los signos grabados en las rocas, todo me habla de ti y de la imposibilidad de la cita.

Resuena un lamento, como si alguien llorase en una cueva lejana y oculta del bosque, encadenado.

Hoy tampoco vendrás.


miércoles, 13 de marzo de 2024

HISTORIA DEL ÁRBOL

Foto: J.X.


Con todo el bosque recién lavado por la lluvia, él se agacha junto a un árbol y cava en la tierra más húmeda para ocultar el tesoro de un amor muerto. Arriba, en las ramas más altas del árbol, florecerán hojas doradas y flores azules.

De una rama colgará el corazón.

De otra rama, el alma.

Alrededor del árbol, el espíritu.

Todo es sueño. Todo es ausencia. 

Bajo la tierra húmeda, un amor nutre las raíces del árbol, pese a la muerte.

martes, 12 de marzo de 2024

ENAMORAMIENTO EN LAS ALTAS RAMAS DE UN ÁRBOL

 Foto: J.X.




Cuenta la leyenda que el peso de su alma se aliviaba cuando surgía de las alcantarillas, como si fuera un pequeño roedor con exceso de carga.

Era entonces cuando el amor de la novia muerta lo alzaba hasta las últimas ramas de un árbol. No hasta el cielo, no tan arriba.

Cuenta la leyenda que a ese amor le bastaba con salir del mundo subterráneo de las alcantarillas, y que ambos no ambicionaban ir más allá de las últimas ramas de un árbol, donde los muertos se enamoraban, y desde las cuales todo podía descubrirse, lo visible y lo invisible.

domingo, 10 de marzo de 2024

NO SON RESTOS PERDIDOS DE AMOR

 Foto: J.X.

Todos los restos de amor vienen de la sangre amorosa.

Del nacer o de la muerte, viene la sangre amorosa y te estigmatiza, manchándote el cuerpo, ensangrentando el alma.

Se derrite como el hielo, río abajo, en el mar, la concepción de todo aquello que perturba el amor del vagabundo y la novia muerta.

Lo que día a día existe lleva la mancha de la sangre amorosa en el cuerpo. Tampoco es justamente una mancha, sino el estigma que dejan en el costado del corazón las cinco flores que aprietan la herida abierta, empapándose de la sangre amorosa que las flores gotearán en los labios de los amantes difuntos.

martes, 5 de marzo de 2024

CUANDO SE PIERDE EL HABLA

 Foto: J.X.

No podía volar.

Tenía el espíritu por el suelo, por debajo del suelo, y tampoco podía volar.

En la mirada, muy adentro de la mirada, una paloma que se muere en un rincón de la calle. Todo, todos, nos morimos en algún rincón.

No quiere hablar con nadie sobre la novia muerta.

Por eso habla solo, consigo mismo, de la sangre amorosa de la novia muerta.

No arrastra ninguna cruz de madera, cierra los ojos y se aleja cuanto puede.

No, no es esto. La sangre amorosa fluye por otro cauce subterráneo de pasión y muerte, que desemboca en el vacío donde se esconde la novia muerta, y hablan, cuando se encuentran, hablan.


viernes, 1 de marzo de 2024

ENLACE CLANDESTINO

Foto: J.X.

Espérame.

Escóndete bien.

Que no nos vean.

Ahora déjate de flores y no hables con los pájaros,

que andan por aquí cerca los perseguidores.

Bueno, pero vigilemos que las flores y las alas de los pájaros

nos cubran bien, y sobretodo no hablemos.

Que los perseguidores nos descubrirían

abrazándonos entre los pájaros y las flores,

y ya sabes cómo son, mal pensados, violentos,

nos atarían las manos y los pies,

quemarían las flores,

cortarían las alas de los pájaros,

y nos matarían por segunda vez.