Foto: J.X.
Alguien dijo: Cuando el alma, constreñida por falta de espacio interior, agujerea el cuerpo, y éste se queda abatido por el dolor y sin palabras, abandonado, ¿acaso el cuerpo continúa hablando por mediación del silencio del alma, que, mientras tanto, prosigue con su labor, agujereándolo hueso a hueso en busca de una salida?
Y otro preguntó: ¿Te refieres a cuando uno adelgaza por sufrimiento?
No hubo más palabras.
1 comentario:
Llega un momento en que el alma necesita libertad, ha estado siempre abrazada por el cuerpo y le ha llegado su liberación. No puede escapar de su encierro sin hacer daño al cuerpo que sólo agujereándolo hueso a hueso puede hablar a través del silencio del alma. Seguramente, este sufrimiento adelgaza.
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