Foto: J.X.
No tiene ni una palabra buena que llevarse a la boca desde hace tiempo.
Así no se puede vivir.
Ya está bien de bromas pesadas, decía una y otra vez.
Esto no es vida.
¿A qué viene tanta desolación, tanto agobio, sin llamar antes a la puerta?
¿Por qué hay que hacer tanto ruido para vivir?
¿Qué significa todo esto? Abriendo y cerrando malos recuerdos, días mortales acuchillando la piel, el corazón.
Tanto grito para nada.
Tanta penuria, tanto abandono, tanta esclavitud. Sin palabras para vivir.
Ramos de flores ardiendo en las esquinas, por todos los rincones.
Tanto desamor reptando en silencio, desembocando en las alcantarillas.
Amor desangrándose en las papeleras solitarias de los cementerios.
Ya no tiene ni una palabra buena que llevarse a la boca, y se da de bruces contra un amor que se desangra en la papelera de un callejón.
1 comentario:
Angel Rodriguez
Ramòn Lupiañez
Jaime D. Parra
Ariel Fridman
Publicar un comentario