sábado, 19 de mayo de 2012

CUANDO TODOS ÉRAMOS MILLONARIOS
















DENUNCIA PÚBLICA ESCRITA EN UNA PARED DEL BARRIO

Si unos cuantos no hubieran vivido muy bien, por encima de sus posibilidades y pagando los demás, que eran la mayoría;
si otros no hubieran vivido bastante bien, por encima de sus posibilidades, pagados por los mismos que vivían muy bien a costa de la mayoría..., ahora no tendrían que vivir mal o tan mal los que ya entonces no vivían bien.
Muchos son los que vivieron por encima de sus posibilidades, pagados con dinero público, que es el dinero privado de todos que se vuelve público y que una minoría malgasta.
Y tenemos como resultado el déficit brutal, la deuda pública y la deuda privada multimillonarias de nada, vacío y recortes, que afecta a todos los que vivían por encima de sus posibilidades y que no tenían un paraíso fiscal, pero que hunde a los que ya entonces vivían por debajo de sus posibilidades.

El suplente del cronista

4 comentarios:

comentarios en Facebook dijo...

A Santiago Fort Barberá y Emiliano Robles les gusta esto.

Sandy Garcia: Y hoy nadie me invita a un café

una asidua al fracaso dijo...

En un barrio de Barcelona, que se mantiene en el anonimato, van a abrir una tienda de empeños donde dicen que se podrá hipotecar el alma por un buen precio. Y la tienda no se llamará Mefistófeles.

Fausto dijo...

¿Una nueva delegación de Bankia en Barcelona? Ténganos informados para acudir cuanto antes.

albert tugues dijo...

comentarios en Facebook

A Teresa Izqui, Inma Arrabal Cano y 3 personas más les gusta esto.

Sandy Garcia: Y hoy nadie me invita a un café.

Mery Sananes: Esa es la triste historia de la humanidad que ni los tabajos más sofisticados y científicos sobre la plusvalía, ni el sacrificio de millones y millones de seres humanos regados por todo el planeta, han podido cambiar. Y hoy esa diferencia e...s tan avasallante y tan bien enmarcado en todo género de coberturas legales, políticcas, sociales, etc etc, que sólo el crecimiento de barrios como éste, y la conciencia de gente como los de la pensión ulises, podrán detener, tal vez, algún día, en algún con el cual seguiremos soñando.