(lavanguardia.com)
DESPUÉS
DE EGIPTO, OTRA VEZ SIRIA, y tiro porque me toca. Las Grandes
Potencias, después de la segunda guerra mundial, casi nunca
resuelven las guerras ajenas en que participan. Ahora, después de
dos años de guerra en Siria, dicen que están estudiando
participar con algún que otro misil o bombardeo tradicional. La
excusa es el armamento químico, que, por cierto, hace ya tiempo que
ambos contendientes vienen usando, según algunas
informaciones.
Algunos, los más optimistas, anuncian que los misiles y las bombas irán sólo cargadas de flores occidentales, explosivas, con metralla, pero sin aquellos componentes químicos que esos mismos países fabricaron y usaron tiempo atrás. Ya sabemos que la energía atómica y otros explosivos de último diseño son más limpios, pero hasta ahora habíamos creído que también mataban. ¿Para cuándo misiles y bombas con energía solar fusionada, mucho más limpia aún? ¿Desde cuándo hay guerras y muertes limpias, no contaminadas?
Algunos, los más optimistas, anuncian que los misiles y las bombas irán sólo cargadas de flores occidentales, explosivas, con metralla, pero sin aquellos componentes químicos que esos mismos países fabricaron y usaron tiempo atrás. Ya sabemos que la energía atómica y otros explosivos de último diseño son más limpios, pero hasta ahora habíamos creído que también mataban. ¿Para cuándo misiles y bombas con energía solar fusionada, mucho más limpia aún? ¿Desde cuándo hay guerras y muertes limpias, no contaminadas?
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