domingo, 11 de noviembre de 2012

PINTADA EN UNA PARED


PINTADA EN UNA PARED:

¿De qué ha servido toda la civilización humana, todo el cuento de nunca acabar sobre la educación humanística y cívica, si luego, por un trazo de trapo convertido en símbolo y llamado bandera, podemos incluso llegar a matar si otras banderas quieren salir al aire libre y ondear? Mal asunto y mala costumbre sangrienta, que ya viene de las tribus prehistóricas y que nunca dejan de ser actualidad en nuestro insuperable mundo moderno.

2 comentarios:

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A Jaime Estuardo Casal Roldán, Àngels Oliveres Serrano, M Cinta Montagut Sancho y 4 personas más les gusta esto.

Rafa León: Las banderas, como los catecismos y misales, son sólo la máscara, el embeleco; el verdadero motivo no se fabrica en tela sino en papel o en devaluados círculos metálicos cuyo brillo inicial se va apagando con el tiempo.
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A.T.: Mal asunto y mala costumbre sangrienta, que ya viene seguramente de las tribus prehistóricas, y que nunca dejan de ser actualidad en nuestro insuperable mundo moderno. Quien tiene una bandera la quiere imponer siempre, y no soporta que otras banderas puedar ondear libremente al viento. Mi bandera es todas las banderas, mi bandera es la mejor, decimos, por muy zurcida y ajada que esté. Matar por una bandera, ¿hay algo más absurdo y cómico, si no fuera trágico? Ya lo decía Gila en uno de sus monólogos humorísticos sobre la guerra y el enemigo. O el cine de Berlanga.
Hace 9 horas · Me gusta · 2

Fernández Darío: I a Jordi lo pusieron en una caixa de pi, abrigat en la senyera de percal or y carmí.
de mi poemari facha q quemó la inquisición :D
Hace 8 horas · Editado · Me gusta

Luis Nadal: Yo me detengo en la primera parte de "la pintada en una pared": ¿De qué ha servido toda la civilización humana...?.
Desde un punto de vista metafísico, al considerar el saber humano, frente al infinito desconocido, su valor es nada. El saber humano seguirá creciendo pero siempre enfrentado a un abismo de ignorancia. El hombre es como un ratón que no para de correr en la noria, sin llegar a ninguna parte.
Desde un punto de vista más pragmático, tenemos la mala costumbre de pasar por alto que toda acción, tiene su reacción, y así podemos ver como cada beneficio que nos reporta el saber, viene acompañado de sus efectos perversos.
El animal humano es incapaz de detener su actividad intelectual y con ella ir cambiando el mundo, sin que cambie nada.
Saberlo no soluciona el problema pero nos puede evitar peores tropiezos y muchos desengaños.
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Luis Nadal: ...moraleja: No somos superiores a un simple ratón pero nos complicamos mucho la vida.
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Albert Tugues: Me gustaría, Darío, leer todo el poema que citas.
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Fernández Darío: Pues nada cualquier día de estos lo termino. Si la Inquisición me deja.
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Fernández Darío: Hala ya te he colgado los ripios de la senyera en mi muro :D
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A.T.: Vale.
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