sábado, 26 de mayo de 2012

LA GUERRA DE LAS FLORES
















Los más vivos dicen que hay que ahorrar y no poner flores sobre las tumbas de los vivos y los muertos.
Los vivos dicen que hay que olvidar las flores de los otros vivos.
Todos los más vivos coinciden en que hay que suprimir las flores  de los muertos y expropiar las flores de los vivos. 
Los muertos dicen que son los más vivos quienes se meten con los vivos y los muertos y acaban con sus flores. 
Mientras tanto, la ONU y la OTAN hacen las maletas y se dirigen a destronar al jefe brujo de una tribu amazónica, el cual se ha solidarizado con el jefe brujo de una tribu africana donde cultivan flores innecesarias.
Dicen que si pasan cerca de Siria, también harán un comunicado para mantener la paz y las flores muertas, como antes hicieran en Libia.
Asociaciones secretas de amnistía y ecología se solidarizan con los organismos anteriores y envían un comunicado para pedir más arbustos, en lugar de flores, para las tribus amazónicas y africanas.
Miles y miles de muertos dicen que no podrán asistir a la ceremonia de cremación de las flores ni a la plantación de arbustos.
Callan las tribus amazónicas y africanas mientras esconden las flores bajo tierra.

El suplente del cronista

1 comentario:

Manuel Marcos dijo...

Mientras no exista un sólo vivo que esté más muerto que los vivos, este mundo no dejará de ser un cementerio sin flores. Queremos un pan y una rosa para cada muerto y cada vivo.