EL RAP DEL REFERÉNDUM

La nieta del anarquista se sube a una mesa del bar y dice que hoy va a rapear para todos ustedes el Rap del Referéndum:

¿Por qué no quieres saber quién está a favor,
quién en contra?
Vota no, vota sí, vota en blanco.
¿Por qué prefieren ensuciarlo todo, caiga quien caiga,
y vivir inmóvil, con la ley del más fuerte,
ignorando las urnas de un país nada imaginario?
Y no saber lo que la gente quiere.
Vota sí. Vota no. Vota en blanco. No votes,
pero que dejen votar, te digo,
a favor, en contra o en blanco.
¿Prefiero ser soberana o federada?,
no diré lo que prefiero, que lo dirá votando.
¿Asociada con el paro de España
o independiente en paro?,
no lo sé, ya lo digo,
que me dejen votar aquí,
y no digo otra cosa, mariposa.
Aunque sea catalana y en paro,
que pueda votar si quiero y me da la gana,
sí, no o en blanco,
que no escuchas ni te enteras, contreras.
Me tiras los tejos
y dices que soy independentista
porque votar quiero,
pero mañana veremos quién trabaja
y te hace la cama..
Que poder votar quiero,
votar de una vez, aunque no vote,
pero, ¿que no lo entiendes, tío,
dónde tienes las orejas?
Poder expresar lo que pienso
aunque no te interese,
votar sí, votar no, votar en blanco,
o no votar y que vote la madre que me parió.
Pero que pueda hacer lo que quiera
en la urna, en el bote,
¿entiendes de qué va el rollo, no, sí,
en blanco o nada?,
que pueda votar,
aquí, vote o no vote.

La nieta del anarquista se baja de la mesa y pide una copa de anís.

Unos silban, otros aplauden.

Otros se quedan perplejos.

La dueña del bar reacciona y dice que ya es hora de tomar otra cerveza o café, tío, que no te enteras y cobra Hacienda.

¡Ud. siempre al rico bollo!, exclama el humorista.

¡Y rapeando en verso libre!, exclama el poeta romántico del barrio.