Dicen en el bar del barrio que sigue la fiesta de
la consulta o participación ciudadana en Catalunya, que se quiere
celebrar al aire libre aunque amanece tormenta.
Pero ahora
declaran y sentencian que es aún más ilegal que la consulta
anterior, comenta el politólogo del barrio. No sé cómo se podrá
hacer.No se hace y ya está, cúmplase la ley, sentencia la cuñada del dentista.
Ahora resulta que esta segunda consulta popular, avalada por la Generalitat, es más ilegal que la anterior, no hay quien lo entienda, dice la sobrina de la peluquera.
Y con toda razón, no sólo más ilegal, sino más pecaminosa, promiscua, inmoral, censurable, impura, nefanda, vergonzosa y sin garantías democráticas, añade la cuñada del dentista.
Digan lo que digan, la fiesta se celebrará al aire libre, responde la nieta del anarquista.
Libre y con la cara al viento, libreeee...!, como cantaba Nino Bravo, ¿recuerdan?, pregunta la dueña del bar, y entona una estrofa de la canción:
"Libre,
como el sol cuando amanece,
yo soy libre como el mar.
Como el ave que escapó de su prisión
y puede, al fin, volar.
Como el viento que recoge mi lamento
y mi pesar,
camino sin cesar
detrás de la verdad
y sabré lo que es al fin..., la libertad."
como el sol cuando amanece,
yo soy libre como el mar.
Como el ave que escapó de su prisión
y puede, al fin, volar.
Como el viento que recoge mi lamento
y mi pesar,
camino sin cesar
detrás de la verdad
y sabré lo que es al fin..., la libertad."
Mucha fiesta y mucho canto al aire libre, pero vigilen que no venga un mal aire, un mal viento y acabe con todo el entoldado y los farolillos de la fiesta popular, replica la cuñada del dentista, que hoy está muy activa y habladora.
Señora, no tema, "a mal tiempo, buena cara"!, exclama el humorista.
"A mal tiempo, buena cara", gran refrán, comenta el poeta romántico del barrio, y nos cuenta lo que significa: "Se puede emplear en sentido literal (el tiempo atmosférico) y metafórico. Referido al físico humano, aconseja no hacer notar los gestos que pueden reflejar nuestra decepción ante cualquier suceso. Referido al comportamiento, recomienda mantener el temple y no desanimarse cuando se presentan contrariedades y momentos difíciles, pues, pese a no poder cambiar la situación, se puede cambiar la actitud", según nos explica el Centro Virtual Cervantes, añade el poeta romántico.
Es todo un cabezón, nuestro poeta, quiero decir, un filósofo!, exclama la dueña del bar.
Poeta, cabezón o filósofo, la cara al viento, "la cara al vent!", como cantaba Raimon en otro tiempo!, responde la sobrina de la peluquera.
Sí, en otra época, cuando no había tiempo para la duda y bajábamos al Barriochino a conspirar y ligar!, exclama el humorista del barrio.