SERAFÍ PITARRA, HIPOS POÉTICOS Y GORKI

Frederic Soler, alias Serafí Pitarra, el autor catalán ya escribía en 1886 Singlots poètics / Gatades cavalleresques (Hipos  poéticos/Gatadas caballerescas).

Autor de un teatro grotesco, provocador, paródico, satírico de mitos y tradiciones (aunque también, cosa sorprendente, autor del famoso poema patriótico sobre el Fossar de les Moreres), se hubiera sentido bien en compañía de los dadaístas, en el Cabaret Voltaire, de Zurich, o al lado de Dalí y los surrealistas.

Se hizo cargo de la relojería de su tío al morir éste, situada en la calle Avinyó, de Barcelona, donde celebraba tertulias con Anselm Clavé, Valentí Almirall y otros amigos, y en cuya trastienda dicen que José Zorrilla, otro amigo suyo, vivió durante unos cuatro años.

Vecino de la calle Escudellers, tiene una estatua al inicio de la calle, en la Plaça del Teatre (Las Ramblas), obra del escultor Agustí Querolt, donde se refugian las palomas envenenadas, junto a un antiguo urinario público por donde había merodeado Jean Genet. Urinario público largo tiempo cerrado y hoy recuperado para los transeúntes que se atrevan a bajar a los bajos fondos del urinario, que diría Gorki, generalmente utilizado por turistas de todo el mundo y vagabundos del barrio.

Pitarra, menospreciado en su tiempo por las clases cultas conservadoras, está siendo hoy reivindicado por algunos autores y directores jóvenes. Pitarra, nuestro vecino.