¿Estamos aún en estado de alarma?, pregunta con precaución un fumador a otro fumador, con temor a fumar clandestinamente y hacer caer el estado de alarma sobre el humo que expelen en la calle, delante del bar donde se les enfría el café con leche desnatada que han pedido.
No creo que acabemo en la cárcel, por mucho que empeoren las cosas del humo, dice el segundo fumador. Veo más oscuro, con mucha más niebla, el destino de los controladores aéreos, su falta de vuelo.
Supongo que no te refieres al "vuelo" místico del que hablaba San Juan de la Cruz cuando decía que "iba de vuelo", añade el primer fumador con ironía poética. Humo clandestino y poesía mística, bromean los dos al mismo tiempo, y tiran la colilla y vuelven a entrar en el bar.
Pere Gastó, Els conspiradors
El suplente del cronista
4 comentarios:
Real , como la vida misma. Muy bueno.
"¿Tienes un cigarro?" Me preguntó un adolescente de monopatín bajo el brazo. Yo seguí caminando sin decir nada, mientras lo miraba con la cara que miro la inconsciencia.
Según la OMS, la edad en la que la mayoría de fumadores se hace adicta al tabaco, es entre los 11 y 14 años, situación que se venía favoreciendo impunemente en España hasta hace días, por meros intereses económicos.
Fernando Yaesta Bien
Hasta el 31 de Diciembre de 2010 Las autoridades en España, favorecían impunemente que los niños de entre 11 y 14 años se hicieran adictos de por vida al tabaco.
Sí, de acuerdo, hay que combatir la adicción al tabaco. Pero aquí en esta España (de charanga y pandereta aún, como decía Antonio Machado), siempre pasamos de la inconsciencia tolerante a la denuncia y persecución del ciudadano. ¿Estamos o no en una democracia? A ver si me entero.
Insurrecta
autocracia para fumar donde me plazca + democracia para irme de donde estén fumando = desigualdad *democracia de pitiminí
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