domingo, 17 de abril de 2011
EL SONIDO DE LAS ESFERAS CELESTES
ENSAYO DE ORQUESTA
También se escucha la música de las esferas celestes en el chasquido de una cerradura.
José Luis Giménez-Frontín
Hacía ya tiempo que en el barrio, al anochecer, se oían sonidos inarmónicos que entraban por balcones y ventanas. Los vecinos, insomnes, subieron un día a la azotea a ver qué pasaba, armados de palos y escobas. No vieron a nadie, a ningún maleante nocturno, pero descubrieron que allí arriba, en un tejado, había un grupo numeroso de gatos abandonados y perros cojos, todos muy ocupados con sus cacharros de metal y cuerda.
Preguntados por su actividad, dijeron que no eran del vecindario, pero que venían al tejado de esta casa, no con la intención de molestar con maullidos y ladridos, sino a ensayar los sonidos que se oyen en el chasquido de una cerradura cuando te echan de casa y te abandonan.
La mancomunidad de vecinos, por cincuenta y dos votos a favor y seis en contra, depuso palos y escobas con la condición de que los ensayos se efectuaran de día y no de noche, y acto seguido los vecinos insomnes se sentaron a escuchar los ensayos de esta singular orquesta de perros cojos y gatos abandonados.
El suplente del cronista
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
5 comentarios:
Dicen que Giménez-Frontín elevó a "princesas" a sus gatas.
Estos días he leído "Conocer el surrealismo", un buen ensayo de divulgación de José Luis Giménez-Frontín sobre el surrealismo.
Estos días leeré la poesía de José Luis.
Tengo encuadernado el suplemento literario del "Tele/Expres", que Giménez Frontín dirigió con Josep Mª Carandell y Jaume Melendres.
Yo leía la revista "Hora de Poesía", donde a menudo colaboraba Giménez-Frontín con artículos y reseñas poéticas.
Publicar un comentario