Vara catalana de medir, 1826
16 de Noviembre, Jornada inaugural
Encuentro a Rodolfo Häsler en el jardín del Ateneu de Barcelona tomando un café. Minutos depués, cuando ya nos disponemos a salir del jardín, vemos en otra mesa a Juan Luis Panero, solo, y nos sentamos a su lado. Nos cuenta que llevaba un rato extraviado por los pasillos y ascensores del Ateneu, buscando en vano el despacho de la ACEC, y que al final había decidido bajar al jardín a tomar algo. "Era como si hubiera entrado en una oficina kafkiana", nos dice asombrado, "con el ascensor modernista arriba y abajo". Después de hablar sobre la lluvia intensa, uno de nosotros le comenta la edición de su poemario Los trucos de la muerte, "éste fue mi segundo libro", nos indica Juan Luis Panero, libro publicado en León en 1975, en la colección de poesía "Provincia" (uno de nosotros llevaba en un sobre un ejemplar de esta misma edición de Los trucos de la muerte para mostrárselo, con la portada manchada por el tiempo, pero al final no lo hizo, "prefirió no hacerlo", como diría Bartleby).
Ya en la sala de actos "Josep María de Sagarra", Miquel de Palol presenta las X Jornadas Poéticas y hace una valoración de la trayectoria de las Jornadas a lo largo de estos años.
A continuación, Rodolfo Häsler presenta a Juan Luis Panero, cuya ponencia o, mejor, "charla", como dice el mismo poeta, no será sobre el tema de la métrica y su tradición, sino sobre sus "descubrimientos literarios" en los años de aprendizaje del "oficio de poeta" (siempre mal remunerado, nos advirtió con su ironía). Y pasó a explicarnos su personal biografía literaria y su relación con algunos de esos poetas de la modernidad: la poesía de Luis Cernuda, Kavafis, T.S. Eliot (cita los Cuatro Cuartetos y su obra crítica), Jorge Luis Borges, César Vallejo (aunque este descubrimiento es otra historia más profunda, añade), Jaime Gil de Biedma, y el impacto de la novela Pedro Páramo y los relatos de El llano en llamas, de Juan Rulfo, largos poemas en prosa más que narrativa, nos indica. Hizo también evocación emocionada de su encuentro con la poesía del poeta catalán Joan Vinyoli, a uno de cuyos versos debe el título de su libro Juegos para aplazar la muerte:
JUEGOS PARA APLAZAR LA MUERTE
Jocs per ajornar la mort
Joan Vinyoli
Descubrir en otro
la palabra precisa,
la desolada materia del sueño,
inmóvil, fija sobre el papel.
Palabra que nombra fantasmas,
pero también llamaradas de vida
y -al fondo- el eco del mar,
su perdurable presencia momentánea,
olas y horas, sílabas y símbolos.
Todo lo que nos queda, todo y nada:
juegos para aplazar la muerte.
A continuación, presentados por Rodolfo Häsler, leyeron los poetas Miquel-Lluís Muntané, Mireia Vidal-Conte y el propio Juan Luis Panero.
17 de Noviembre, Jornada segunda
"La construcción de la tradición poética occidental", mesa redonda con Guillermo Carnero y Salvador Oliva.
Presenta el acto Valentí Gómez i Oliver, que llega a la mesa blandiendo un canon egipcio o "meh", de madera (construido por un gran egiptólogo, nos indica), canon o "caña" que mide 0,523 mm. (de donde viene la palabra "canon", en lengua asirio-babilónica, añade Valentí Gómez i Oliver), una vara cuya medida equivaldría aproximadamente a la del codo castellano.
Pero hoy no se trata de medir la figura humana, ni la extensión de la tierra ni el espacio astronómico, sino el verso, la medida del verso. Y comienza Salvador Oliva a exponer sus ponencia, magistral, sobre la evolución de la métrica desde los poetas griegos y latinos hasta hoy, enumerando las diferentes clases de verso según la combinación métrica de las sílabas, según la medida, el acento y la rima. Comentó la traducción al catalán de la Odisea y de otras obras clásicas, de Carles Riba, así como su afán por adaptar la métrica clásica a la poesía catalana, y mencionó también las traducciones de Llorenç Riber y Miquel Dolç. Valoró la "métrica compleja" de Josep Carner, más variada y adaptable a la lengua poética catalana, y nos leyó algunos poemas de Joan Ferraté, J.V. Foix y Gabriel Ferrater a modo de ejemplo de lo antedicho sobre arte métrica.
Acto seguido, el otro ponente, Guillermo Carnero, se refirió a la renovación de la métrica creada por Rubén Darío y los modernistas, partiendo de la lectura de Verlaine, los cuales transgredieron la métrica clásica y aproximaron de este modo, con disonancias y "versos cojos", la métrica tradicional de la poesía a la medida y al ritmo de la prosa, una de las características significativas de la poesía contemporánea.
Nos presentó una demostración rigurosa de lo enunciado al leer el poema El reino interior, del libro Prosas profanas, de Rubén Darío. También nos hizo una magnífica y divertida lectura de unos versos satíricos de La marquesa Rosalinda, la "farsa sentimental y grotesca" de Valle-Inclán sobre unos cambios de personalidad que experimenta un marido español, "calderoniano":
Pues de un brinco ha pasado, con su borla de estoico,
de Doctor en Versalles a castellano heroico.
(...)
Yo mejor lo atribuyo al cambio de manjares.
¡La sobrasada de las islas Baleares1
¡El marisco gallego, que es de tanto deleite!
¡Y ese queso manchego, tan metido en aceite!
A continuación, pasamos a la lectura de poemas, presentada por Lluís María Todó, en la que participaron Guillermo Carnero, con una lectura de cuatro poemas, uno de ellos satírico; Salvador Oliva, que nos leyó unos sonetos de Shakespeare y un poema de Auden traducidos por él mismo, así como uno de sus poemas; y Marina Oroza, que nos ofreció una conmovedora performance-poética, con una lectura de periódico incluida, resaltando la palabra "ayer" en una serie de noticias que le sirvieron para componer un poema aleatorio.
Hoy, 18 de Noviembre
Hoy finalizarán esta X Jornadas Poéticas con la conferencia de clausura a cargo de Carles Miralles, y con la última lectura de poesía, presentada por Pura salceda, en la que participarán los poetas Jaume Pons Alorda, Estíbaliz Espinosa y Carles Miralles.
El suplente del cronista
16 de Noviembre, Jornada inaugural
Encuentro a Rodolfo Häsler en el jardín del Ateneu de Barcelona tomando un café. Minutos depués, cuando ya nos disponemos a salir del jardín, vemos en otra mesa a Juan Luis Panero, solo, y nos sentamos a su lado. Nos cuenta que llevaba un rato extraviado por los pasillos y ascensores del Ateneu, buscando en vano el despacho de la ACEC, y que al final había decidido bajar al jardín a tomar algo. "Era como si hubiera entrado en una oficina kafkiana", nos dice asombrado, "con el ascensor modernista arriba y abajo". Después de hablar sobre la lluvia intensa, uno de nosotros le comenta la edición de su poemario Los trucos de la muerte, "éste fue mi segundo libro", nos indica Juan Luis Panero, libro publicado en León en 1975, en la colección de poesía "Provincia" (uno de nosotros llevaba en un sobre un ejemplar de esta misma edición de Los trucos de la muerte para mostrárselo, con la portada manchada por el tiempo, pero al final no lo hizo, "prefirió no hacerlo", como diría Bartleby).
Ya en la sala de actos "Josep María de Sagarra", Miquel de Palol presenta las X Jornadas Poéticas y hace una valoración de la trayectoria de las Jornadas a lo largo de estos años.
A continuación, Rodolfo Häsler presenta a Juan Luis Panero, cuya ponencia o, mejor, "charla", como dice el mismo poeta, no será sobre el tema de la métrica y su tradición, sino sobre sus "descubrimientos literarios" en los años de aprendizaje del "oficio de poeta" (siempre mal remunerado, nos advirtió con su ironía). Y pasó a explicarnos su personal biografía literaria y su relación con algunos de esos poetas de la modernidad: la poesía de Luis Cernuda, Kavafis, T.S. Eliot (cita los Cuatro Cuartetos y su obra crítica), Jorge Luis Borges, César Vallejo (aunque este descubrimiento es otra historia más profunda, añade), Jaime Gil de Biedma, y el impacto de la novela Pedro Páramo y los relatos de El llano en llamas, de Juan Rulfo, largos poemas en prosa más que narrativa, nos indica. Hizo también evocación emocionada de su encuentro con la poesía del poeta catalán Joan Vinyoli, a uno de cuyos versos debe el título de su libro Juegos para aplazar la muerte:
JUEGOS PARA APLAZAR LA MUERTE
Jocs per ajornar la mort
Joan Vinyoli
Descubrir en otro
la palabra precisa,
la desolada materia del sueño,
inmóvil, fija sobre el papel.
Palabra que nombra fantasmas,
pero también llamaradas de vida
y -al fondo- el eco del mar,
su perdurable presencia momentánea,
olas y horas, sílabas y símbolos.
Todo lo que nos queda, todo y nada:
juegos para aplazar la muerte.
A continuación, presentados por Rodolfo Häsler, leyeron los poetas Miquel-Lluís Muntané, Mireia Vidal-Conte y el propio Juan Luis Panero.
17 de Noviembre, Jornada segunda
"La construcción de la tradición poética occidental", mesa redonda con Guillermo Carnero y Salvador Oliva.
Presenta el acto Valentí Gómez i Oliver, que llega a la mesa blandiendo un canon egipcio o "meh", de madera (construido por un gran egiptólogo, nos indica), canon o "caña" que mide 0,523 mm. (de donde viene la palabra "canon", en lengua asirio-babilónica, añade Valentí Gómez i Oliver), una vara cuya medida equivaldría aproximadamente a la del codo castellano.
Pero hoy no se trata de medir la figura humana, ni la extensión de la tierra ni el espacio astronómico, sino el verso, la medida del verso. Y comienza Salvador Oliva a exponer sus ponencia, magistral, sobre la evolución de la métrica desde los poetas griegos y latinos hasta hoy, enumerando las diferentes clases de verso según la combinación métrica de las sílabas, según la medida, el acento y la rima. Comentó la traducción al catalán de la Odisea y de otras obras clásicas, de Carles Riba, así como su afán por adaptar la métrica clásica a la poesía catalana, y mencionó también las traducciones de Llorenç Riber y Miquel Dolç. Valoró la "métrica compleja" de Josep Carner, más variada y adaptable a la lengua poética catalana, y nos leyó algunos poemas de Joan Ferraté, J.V. Foix y Gabriel Ferrater a modo de ejemplo de lo antedicho sobre arte métrica.
Acto seguido, el otro ponente, Guillermo Carnero, se refirió a la renovación de la métrica creada por Rubén Darío y los modernistas, partiendo de la lectura de Verlaine, los cuales transgredieron la métrica clásica y aproximaron de este modo, con disonancias y "versos cojos", la métrica tradicional de la poesía a la medida y al ritmo de la prosa, una de las características significativas de la poesía contemporánea.
Nos presentó una demostración rigurosa de lo enunciado al leer el poema El reino interior, del libro Prosas profanas, de Rubén Darío. También nos hizo una magnífica y divertida lectura de unos versos satíricos de La marquesa Rosalinda, la "farsa sentimental y grotesca" de Valle-Inclán sobre unos cambios de personalidad que experimenta un marido español, "calderoniano":
Pues de un brinco ha pasado, con su borla de estoico,
de Doctor en Versalles a castellano heroico.
(...)
Yo mejor lo atribuyo al cambio de manjares.
¡La sobrasada de las islas Baleares1
¡El marisco gallego, que es de tanto deleite!
¡Y ese queso manchego, tan metido en aceite!
A continuación, pasamos a la lectura de poemas, presentada por Lluís María Todó, en la que participaron Guillermo Carnero, con una lectura de cuatro poemas, uno de ellos satírico; Salvador Oliva, que nos leyó unos sonetos de Shakespeare y un poema de Auden traducidos por él mismo, así como uno de sus poemas; y Marina Oroza, que nos ofreció una conmovedora performance-poética, con una lectura de periódico incluida, resaltando la palabra "ayer" en una serie de noticias que le sirvieron para componer un poema aleatorio.
Hoy, 18 de Noviembre
Hoy finalizarán esta X Jornadas Poéticas con la conferencia de clausura a cargo de Carles Miralles, y con la última lectura de poesía, presentada por Pura salceda, en la que participarán los poetas Jaume Pons Alorda, Estíbaliz Espinosa y Carles Miralles.
El suplente del cronista
No hay comentarios:
Publicar un comentario