¿Sin mayoría?, ¿golpes de Estado? Vuelve
la furia española (en este caso, nada deportiva), lo he leído en el
diario “El País”, informa la sobrina de la peluquera: “ERC,
PDECat y la CUP son formaciones con vocación absolutista, dispuestas
a dar golpes de Estado encubiertos y a imponer su voluntad sin
mayoría a todos los catalanes" (Javier Marías, "Qué no
es una sociedad libre" | Columnas | EL PAÍS Semanal).
¿ERC, PDECat y la CUP han perdido la mayoría en el Parlament, y yo sin enterarme?, pregunta el politólogo del barrio, asombrado.
¡Es
lo que nosotras venimos diciendo desde los años 50, 60, 70 y 80, un
golpe de Estado catalanista, y sin que venga la División Acorazada
Grumete a salvarnos!, exclaman al unísono la cuñada del dentista y
la vecina que fiscaliza por tiendas y bares.
La
Brunete, la División Acorazada Brunete, señoras, no la Grumete,
aclara un desconcido con gabardina gris.
¡Bueno, la Brunete o lo que sea, pero que vengan ya!, replica la cuñada del dentista.
¡Bueno, la Brunete o lo que sea, pero que vengan ya!, replica la cuñada del dentista.
Ah,
creía que hablaban del reportero “Tribulete, que en todas partes
se mete”, indica el humorista.
Bienvenidos al Club de los Visionarios, dice la vidente del barrio.
Todo esto es una locura, y yo me quedo “Con faldas y a lo loco”, sostiene la hermana del informático.
Bienvenidos al Club de los Visionarios, dice la vidente del barrio.
Todo esto es una locura, y yo me quedo “Con faldas y a lo loco”, sostiene la hermana del informático.
Es
lo que hace mi madre, se levanta las faldas bailando, a lo loco, y
espanta a los novios, bromea la hija de la bibliotecaria.
Ya lo decía mi abuelo y sus amigos pacifistas: mientras haya imperialismos de ataque, habrá nacionalismos de defensa, advierte la nieta del anarquista.
Ya lo decía mi abuelo y sus amigos pacifistas: mientras haya imperialismos de ataque, habrá nacionalismos de defensa, advierte la nieta del anarquista.
Como
en el fútbol, apunta el poeta romántico, cuyo padre, por cierto, no
era del Barça, sino del Sabadell, añade.
Cada
día se aprende algo y luego se olvida todo, afirmaba mi madre,
concluye la dueña del bar.
No hay comentarios:
Publicar un comentario