lunes, 23 de junio de 2014

PLATÓN, LA REPÚBLICA, SANTOS JULIÁ Y LOS REPUBLICANOS QUE NUNCA EXISTIERON

El politólogo del barrio nos lee en el bar unas notas que ha escrito sobre un artículo publicado en el diario “El País” el 19 de junio:
Magnífico trabajo del historiador Santos Juliá (Premio Nacional de Historia), "Una tradición inventada", sobre la cuestión de la II República, la monarquía constitucional y la “tradición republicana inventada” de muchos republicanos de hoy -lee el politólogo en el bar del barrio.
Un artículo, sin embargo, algo exagerado, me parece -prosigue leyendo el politólogo-, al considerar que en España no hubo nunca socialistas, comunistas y anarquistas, antes de la guerra civil, que fueran realmente republicanos, ya que, como buenos marxistas, los socialistas, comunistas y anarquistas (éstos más bakunianos) utilizaban en todo caso la República como medio para llegar al poder y unos, socialistas y comunistas, pasar luego a la dictadura del proletariado o algo parecido, mientras que otro, los anarquistas, pasarían del poder al no-poder asambleario.
Pero, ¿no había excepciones, no había verdaderos republicanos entre ellos? Asombroso, ¿será cierto que en aquella famosa República española no había verdaderos republicanos de izquierdas, tampoco de derechas, y que todas la utilizaban para alcanzar otro sistema político, seguramente más totalitario, de izquierdas o de derechas?
No menciona que los presidentes de la Generalitat de Catalunya, Macià y Companys, eran catalanistas pero también republicanos, y ambos declararon oficialmente la República Catalana en dos ocasiones (1931 y 1934), pero sí que sugiere que también este posicionamiento republicano era una estrategia para la independencia. 
Así pues, allí, en aquella pobre II República, nadie era republicano ni creía en la república: "(...) su cultura y prácticas políticas, sus estrategias y metas finales, no eran la República de 1931 sino el comunismo, el socialismo, el anarquismo o la independencia de las naciones", escribe Santos Juliá. Asombro. Dudas. Quizá tenga razón.
En cuanto a la República catalana, que sólo duró dos o tres días a causa de la represión militar, fue una república tan breve que siempre es objeto de burla por ciertos politólogos y tertulianos, omitiendo que la II República española tampoco fue tan larga y no duró más de cinco años y unos días a causa de otra represión, el alzamiento militar y la guerra civil.
Bueno, dirán esos politólogos y tertulianos, por lo menos duró cinco años más, y por tanto ya podemos rezar y reírnos en la casa del señor, que todo lo puede...” -el politólogo da por finalizada la lectura de su texto.

-Oiga, vaya resaca que lleva Ud. con tanta abdicación y proclamación, con tanta monarquía y república, dice la dueña del bar.
-Tiene razón este señor del diario, mi abuelo era contrario a todos los poderes y tampoco era republicano, apunta la nieta del anarquista.
-Todos unos platónicos, “somiatruites”, como un novio que tuve, comenta la cuñada del dentista.
-¿Se refiere a Platón, el personaje de Rebelde sin causa, amigo de James Dean, interpretado por Sal Mineo?, pregunta la hija cinéfila de la bibliotecaria.
No, nena, no, platónico viene de Platón, el autor de la República, libro que por cierto no es novedad y en la librería lo tenemos descatalogado, informa la librera del barrio.
-Platón, que era poeta además de filósofo, recuerda el poeta romántico del barrio.
-Y tanto!, conocía bien el percal de los poetas y por eso los expulsaba de su República!, exclama el humorista.
-Para un tapeo con cerveza es más estimulante hablar de los vestidos de la ceremonia real, advierte la dueña del bar.
-Exacto, había una señora del PP que parecía la tercera infanta con aquel abrigo blanco, corto, de primavera!, apunta la sobrina de la peluquera.
-Un poco de seriedad, respeten la formas, advierte la cuñada del dentista.
-Señora, que es verbena, la verbena de Sant Joan, no me sea tiquis-miquis!, concluye la dueña del bar.
-Digan lo que digan, / canten lo que canten, / mi tío y yo siempre seremos / rumberos y republicanos!, dice el humorista del barrio, cantando.

4 comentarios:

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A Maricel Usano Crespo, M Cinta Montagut Sancho, Rafael Blanco y 2 personas más les gusta esto.

Efi Cubero: Esto es hablar clara y sensatamente. Sí. Un artículo sin demagogias baratas.
hace 23 horas ·

M Cinta Montagut Sancho: "El País" tiene una querencia hacia la derecha que atufa bastante
hace 21 horas ·

Rafael Blanco: Es lo más exacto y verídico que jamás nadie haya escrito. Efectivamente, los rencorosos de la guerra, los viejos caducos que aún quedan, los que ganaron y perdieron, no eran republicanos. Todos, absolutamente todos, querían el poder para después hacer su dictadura. Por eso, los anarquistas se tiroteaban con los comunistas, con los de derechas, y los socialistas no querían a los comunistas ni anarquistas..., los periodistas de estos partidos, andaban a tiros por las calles, se lo oí decir a mi hermano mayor (ya muerto, hace muchos años, con cerca de 90 años y que viviò esta guerra)...

Jaime Lagarde: Siempre lo he dicho... Entre resolver 'el problema de España' en facebook y resolverlo en el bar del barrio, me sigo quedando con el bar del barrio.
hace 15 horas · Editado ·

Maricel Usano Crespo: Mi padre, Manuel Usano Martín, uno de los promotores de la FUE de Valencia, y muchos de sus compañeros y amigos, eran comunistas y fervientemente republicanos. No ambicionaban la dictadura del proletariado, sino una sociedad igualitari, cuyos gobernantes fueran elegidos democráticamente por los ciudadanos. Pienso que Santos Juliá exagera, quizás obnubilado por los fastos monárquicos!
Hace 8 horas ·

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A Maricel Usano Crespo, M Cinta Montagut Sancho, Rafael Blanco y 2 personas más les gusta esto.

Efi Cubero: Esto es hablar clara y sensatamente. Sí. Un artículo sin demagogias baratas.
hace 23 horas ·

M Cinta Montagut Sancho: "El País" tiene una querencia hacia la derecha que atufa bastante
hace 21 horas ·

Rafael Blanco: Es lo más exacto y verídico que jamás nadie haya escrito. Efectivamente, los rencorosos de la guerra, los viejos caducos que aún quedan, los que ganaron y perdieron, no eran republicanos. Todos, absolutamente todos, querían el poder para después hacer su dictadura. Por eso, los anarquistas se tiroteaban con los comunistas, con los de derechas, y los socialistas no querían a los comunistas ni anarquistas..., los periodistas de estos partidos, andaban a tiros por las calles, se lo oí decir a mi hermano mayor (ya muerto, hace muchos años, con cerca de 90 años y que viviò esta guerra)...

Jaime Lagarde: Siempre lo he dicho... Entre resolver 'el problema de España' en facebook y resolverlo en el bar del barrio, me sigo quedando con el bar del barrio.
hace 15 horas · Editado ·

Maricel Usano Crespo: Mi padre, Manuel Usano Martín, uno de los promotores de la FUE de Valencia, y muchos de sus compañeros y amigos, eran comunistas y fervientemente republicanos. No ambicionaban la dictadura del proletariado, sino una sociedad igualitari, cuyos gobernantes fueran elegidos democráticamente por los ciudadanos. Pienso que Santos Juliá exagera, quizás obnubilado por los fastos monárquicos!
Hace 8 horas ·

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Javier González: Muy de acuerdo con el riguroso artículo de Santos Juliá. Socialistas y comunistas siempre despreciaron a la República. En realidad utilizaron a la República como el trampantojo de su revolución, incómodo pero inevitable escalón antes de llegar a un régimen a semejanza de los soviets. De los nacionalistas no recibió la República mejor trato. Euskadi la traicionó abiertamente, lo que precipitó la caída del frente Norte. Cataluña la apoyó a regañadientes, porque no la quedaba otra y porque la "guerra por su cuenta" de Euskadi había sido un ejemplo calamitoso. La II República vivió y murió bien sola, solo tuvo el afecto y la defensa sincera de anarquistas y votantes de CEDADE, lo que no deja de ser una amarga paradoja.
23 de junio a la(s) 10:53 · Me gusta