Périto en lunas, con el silbo vulnerado, bajo el rayo que no cesa y el viento del pueblo, un hombre acecha con un cancionero y un romancero de ausencias en las manos:
Ausencia en todo siento: Ausencia. Ausencia. Ausencia.
En mi país se ha vuelto a recordar a Miguel Hernández gracias a Joan Manuel Serrat, que es un ídolo allí y marca pautas. No se si en España ha sucedido lo mismo, cualquier excusa sería buena. Ausencias, ausencias, cuantos estamos ausentes y cuantas ausencias sentimos... Esperanza
1 comentario:
En mi país se ha vuelto a recordar a Miguel Hernández gracias a Joan Manuel Serrat, que es un ídolo allí y marca pautas.
No se si en España ha sucedido lo mismo, cualquier excusa sería buena.
Ausencias, ausencias, cuantos estamos ausentes y cuantas ausencias sentimos...
Esperanza
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