Foto: J.X.
A causa del fuerte viento de estos días, en el Cementerio marino hay muchos ramos de flores en el suelo, derribados de los vasos metálicos adheridos a las puertecitas de cristal que suelen tener la mayoría de nichos, como protección. Hay tantos ramos tumbados, que forman largos y diversos paseos de flores extendidas.Hoy, al ir a visitarla a ella, han salido a recibirle rosas blancas y claveles rojos, pétalos desprendidos de los ramos y extendidos hasta la misma entrada a la Isla II, donde se aloja la novia muerta.
(Ha ido a visitarla después de un tiempo de alejamiento, por unos problemas oculares. Ya se lo había advertido alguien: “El exceso de visiones te hará perder de vista el mundo y puedes tropezar con cualquier obstáculo de la realidad cotidiana”.)
En otras ocasiones, en sus visitas al camposanto, había hecho de jardinero y recogía los ramos de flores derribados por el viento (la mayoría de esos ramos suelen ser de flores de plástico o de tela).
Algunos de los ramos, en los nichos más bajos, a ras de tierra, estaban aún en pequeños floreros que los familiares habían traído de casa, floreros ahora tumbados o rotos por el viento.
Otros ramos de los que estaban en el suelo, sin floreros, el aprendiz de jardinero los enderezaba al lado de los nichos más próximos, puesto que, al no constar los nombres en los lazos de los ramos, no sabía a quién podían pertenecer esas ofrendas de flores.
Pero, hoy, eran tantos los ramos tumbados, flores y pétalos extendidos, desprendidos por el viento, que no se ha atrevido a hacer de jardinero, como le habría gustado.
Todo el camposanto era como un paseo de ramos extendidos, como una larga y ancha alfombra de flores de todos los colores, desplegada para el paseo nocturno de las novias muertas, de paso delicado.
1 comentario:
El vent continua i no és difícil imaginar l'espectacle tan ben descrit en el teu relat d'avui. M'agrada molt el final: "las novias muertas" tenen una catifa de flors per passejar quan es fa fosc.
Publicar un comentario