FOLLETO ENCONTRADO EN LA CALLE
Escribía una palabra tras otra, sin descanso, y dicen que lo hacía para olvidar las anteriores, las que ya había escrito.
También dicen que todo lo que escribió no sirvió de nada,
y cuando lo mataron desparecieron todas sus palabras.
Hoy, apenas un par de vecinos recuerdan su nombre.
El suplente del cronista
2 comentarios:
Francesc Cornadó: Hay quien pasa a la posteridad.
Una dedicación tal merecía ser respetada y recordada.
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