AMANECER VERANIEGO
Los primeros rayos del sol se desperezaban tras la montaña de Montjuïc, sin haber logrado superar, todavía, la alzada del edificio situado al otro lado de la avenida, proporcionando una imagen a contraluz, matizada por un efecto vaporoso.
En el lecho de la sombra proyectada, un hermoso jilguero calmaba su sed en un charco formado por la condensación de un aparato de aire acondicionado del coche que, hacía un instante, había parado obligado por un apático semáforo.
El asfalto se ofrecía, caliente, a todos los vehículos que más tarde rodarían sobre él, rumbo a las playas dominicales.
Raúl Yagüe
3 comentarios:
Ofertas de verano, carteles de supermercado y poesía dadaísta, con un relato del pájaro que bebía gotas de aire acondicionado en el asfalto, y un par de "canciones country", con los maestros Willie Nelson, Johnny Cash y Bob Dylan. Leído y escuchado a la sombra de un balcón con la persiana bajada, esto sí que es un buen tinto de verano!
Uno que veranea en el barrio
El programa de ofertas del "súper" sí que es un buen poema visual dadá.
Una que veranea en la playa de l'Alt Maresme
Me ha encantado el pobre jilguero en el asfalto, bebiendo las gotas que expulsan los automóviles que van a la playa. He visto gorriones que hacen lo mismo, delante del Teatro Apolo.
La quiosquera de periódicos y revistas del Paralelo
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