¿POR QUÉ...?, Y LA TRADICIÓN DE LAS MULTAS POLÍTICAS

La vidente del barrio se sube a una silla del bar y lee un panfleto que se ha encontrado por la calle. Dice así:

"¿Por qué se denuncia, se persigue, se detiene, se juzga, se encarcela y se mata por ideas políticas y religiosas? (El caso del fútbol y los forofos, aun con sus peleas y heridos, no es tan venenoso ni letal).

¿Por qué ese apasionamiento, por qué tanta visceralidad y agresividad dialécticas, hasta llegar a las manos, y cosas peores, como torturas, atentados, condenas de muerte, penas de cárcel, etc.?

Ni en el mundo de la poesía, ni en la novela, ni en el teatro, ni en el arte y la música, por ejemplo, ocurren de verdad, con sangre que mancha las manos, todas estas cosas terribles -dejando aparte algunos casos puntuales (y amorosos), como el de Verlaine persiguiendo a Rimbaud, pistola en mano.
Cuando hay una guerra o cuando hay represiones, ¿se hacen pensando en el paro y la miseria, en la explotación y el racismo, en el abuso de poder y la indefensión, en la esclavitud moderna y en la injusticia constante del poderoso sobre el débil, ya sean personas o naciones?"

Cuando la vidente acaba de leer, hay aplausos, abucheos, silbidos, elogios e insultos: la vida sigue, como siempre, en el bar del barrio.
La nieta del anarquista se sube también a una silla y lee una nota escrita por una vecina del barrio, que no quiere ser identificada: 

"La tradición de las multas políticas en España.

Cuenta el escritor Kirmen Uribe, en su libro La hora de despertarnos juntos, que el franquismo, además de perseguir y encarcelar a sus adversarios y enemigos, también ponía multas a sus familias por razones políticas, hasta arruinarlas y destruirlas. "El horror, el horror", como dice el personaje de Joseph Conrad en El corazón de las tinieblas."

La dueña del bar pregunta: ¿De qué ha servido la transición, de qué sirve la democracia si hay que recurrir otra vez a la guardia civil y a las misas de Montserrat? 

Ésta es la pregunta del millón (de multas), contesta el humorista del barrio.

"¿NOS LLEVARÁN A LA CÁRCEL O...?"

¿Nos llevarán a la cárcel o nos multarán?, se preguntan algunos en el bar del barrio.

Por mal comportamiento, por querer una consulta, por querer ser consultados e intentar votar, ¿nos castigarán de cara a la pared, o nos pondrán de espaldas contra un muro, castigados de rodillas, quizá simulando una ejecución, como le pasó al escritor ruso Dostoievski, o nos arruinarán a golpes de multa?, pregunta el poeta romántico del barrio, sin duda exagerando épicamente, comenta otro cliente, un desconocido.

No alucine, no diga barbaridades, querido poeta, que aquí somos demócratas y no fusilamos a nadie, advierte la fiscal del barrio, que no es fiscal, sino vecina que fiscaliza en el bar.
¡Qué más quisieran, ya les gustaría tener un buen mártir!, añade la cuñada del dentista.

¿Nos llevarán a la cárcel, y esta acción represiva será apoyada por los españoles llamados progresistas en nombre de la democracia y a favor de las urnas, que no son estas urnas, sino otras con denominación de origen?, se pregunta la nieta del anarquista.

Malos tiempos para la lírica en España, como anuncian algunos medios: "Ya no estamos en el momento de la poesía, de la lírica, sino en el momento de la Ley, de todo el peso de la Ley", advierte la vidente del barrio.

¡A por ellos, que caiga todo el imperio de la Ley sobre estos herejes, que ya no es momento de poesía, ni de sardanas, ¡ni de pan con tomate!, exclaman otros.

El horror, el horror, susurra alguien, saliendo del bar.
¿Qué pasa, qué ocurre?, pregunta un grupo de turistas.
Cacerolas, potes, sartenes y paellas en lucha, contesta el humorista del barrio.

Una de las secuencias finales de la película El Proceso, de Orson Welles

UNA PAPELETA HISTÓRICA

Comenta la hermana del informático un hallazgo: Acabo de descubrir, dice, una vieja papeleta de multa (gracias al envío de una escritora amiga, cuyo nombre no diré, que ya va siendo peligroso dar nombres). La multa es del año 1938, nada que ver, pues, con la actualidad (Otro paréntesis: “cualquier parecido con la realidad es pura coincidencia", como se dice en libros y películas. Que no se equivoquen, pues, los vigilantes oficiales o de paisano, que de todo hay en en la viña del señor y en la calle).

Es una mala historia cuando hay que poner tantos paréntesis, dice la nieta del anarquista.

Terrible. Gracias a todos por la ayuda..., comenta alguien en el bar del barrio.

¡Ustedes se lo han buscado!, replica la cuñada del dentista.

Ay, madre mía, si hay que recurrir otra vez a la guardia civil y a las misas en Montserrat, ¿para qué sirve la democracia?, pregunta la dueña del bar.

De aquellos polvos estos lodos, de aquellos lodos estos polvos, qué más da, es la democracia, estúpidos, la democracia, dice la vidente del barrio, insultando a no sabemos quién.

El horror, el horror, repite el poeta romántico del barrio.

Vamos, no exageren, no hay para tanto, de vez en cuando va bien una buena purga, advierte la cuñada del dentista.

Me sumo, gracias, añade un desconocido.

Hombre, de nada, ¿pero qué pasa, qué ocurre?, pregunta el numismático del barrio.
Repito, si hay que recurrir otra vez a la guardia civil y a las misas, ¿para qué sirve la democracia?, pregunta la dueña del bar.

MANIFIESTO EN MONTREAL

Vídeo de la lectura de Miquel de Palol, Mireia Vidal-Conte y Èric Viladrich, en Montreal (Quebec). 

¿UNA MISA EN MONTSERRAT PRO-REFERÉNDUM?

Fotografía: racocatala.cat

¡Cuentan que ayer apareció el espíritu del Abad Escarré en el altar, durante una misa en Montserrat!, exclama la vidente del barrio.

La sobrina de la peluquera lee en el bar del barrio: «Se prohíbe un derecho tan sencillo como el de ser consultados», y ha añadido (el monje de Montserrat, Sergi d'Assis) que se menosprecia a las instituciones catalanas y, por tanto, también a los ciudadanos que representan, según él. Ha pedido afrontar la situación con espíritu pacífico y estando en el lugar que corresponde en este momento de la historia, y ha añadido: «Tenemos que decir "no" a la represión y "sí" a la libertad y al respeto a los derechos más fundamentales». Publicado en el diario conservador ABC, añade la sobrina de la peluquera.

¡Esto es el colmo, en mi ABC! ¡Ni siquiera en tiempos de Franco y el Abad Escarré hubo tanta decadencia ni ocurrían estas cosas!, advierte la cuñada del dentista.

Exacto, como dice el presidente del PPC, García Albiol: "La decadencia que en estos momentos están sufriendo las instituciones catalanas, una decadencia que ni en tiempos de Franco se había vivido", confirma el politólogo del barrio.

Parece ser que a algunos les traiciona el subconsciente, apunta el humorista.

Traición, desacato, sedición del subconsciente, como diría un amigo mío, psicoanalista lacaniano, comenta la nieta del anarquista.
Ay, madre mía, si hay que recurrir otra vez a la guardia civil y a las misas, ¿para qué sirve la democracia?, pregunta la dueña del bar.

BARRIENDO EN LA UNIVERSIDAD

Escobas rebeldes. Estudiantes barriendo. Testimonio gráfico y de denuncia de los universitarios acampados en la Universidad de Barcelona, que, utilizando la fuerza de la palabra (no la otra), barren amenazas y represiones.
Alguien escribe en un cartón estas palabras de Bakunin: 
"Me siento, franca y constantemente, patriota de todas las patrias oprimidas".

Fotografía: Janet Xirgu, "Complicidad con los universitarios que barren Barcelona"

SIGUEN LAS REPRESENTACIONES DEL TEATRO DEL ABSURDO

Cruzando el puerto de un absurdo a otro, dice la sobrina de la peluquera.

El Crucero Disneylandia baja el telón del teatro del absurdo, comenta alguien en el bar del barrio.

También conocido como Crucero Piolín, Píolindo, de la empresa Moby Dada, informa la hermana del informático mirando el móvil.

Que no es la ballena Moby Dick, ni el movimiento artístico Dadá, comenta el humorista.

¿Cómo dice?, pregunta la dueña del bar.

Desacatos, como siempre, ¡son unos irreverentes!, replica la cuñada del dentista.

Jarabe de palo es lo que necesitan, advierte la fiscal del barrio, que no es fiscal, sino vecina que fiscaliza en el bar.

Dentro de cien años (siendo muy optimistas), todos calvos, pronostica la vidente.

¿Qué pasa, qué ocurre?, pregunta un turista de Islandia.

(Fotografías: magnet.xataca.com, lavanguardia.com) 

REGRESO DEL PASADO AL PRESENTE, Y DE LA DEMOCRACIA AL BACALAO

Noticia de última hora: "Los mossos no aceptan la coordinación impuesta por el Estado", como en los tiempos de la República, como en los tiempos de Macià y Lluís Companys, comentan algunos en el bar del barrio.

"El conseller d'Interior, Joaquim Forn, ha anunciat aquest dissabte amb una breu declaració institucional que els Mossos d'Esquadra no accepten la coordinació de l'Estat. "No acceptem aquesta ingerència de l'Estat", ha advertit."

LA ACCIÓN DE LA NO-VIOLENCIA

"Hay que evitar la violencia y las provocaciones, continuar con la acción no-violenta y la resistencia pacífica de las gentes y las instituciones, utilizando la palabra y la cultura como instrumentos, ya no estamos en el siglo de las dictaduras y la fuerza bruta", dice la dueña del bar leyendo un mensaje en el móvil.

DE LA DEMOCRACIA AL BACALAO

"Un coronel de la Guardia Civil coordinará también a los Mossos para evitar el referéndum", lee la dueña del bar.
"El consejero de Interior, Joaquim Forn, ha anunciado que la policía catalana no acepta la decisión", lee la sobrina de la peluquera.

¿Tantos años de transición democrática para llegar a esto?, ¿para llegar, no a la palabra, sino otra vez a la guardia civil?, pregunta el poeta romántico del barrio.

Ustedes se lo han buscado, responde la cuñada del dentista.
Democracia, es la democracia, estúpidos, no la fuerza bruta del siglo pasado, apunta la vidente.

¿Qué ocurre, qué pasa con el Barça?, pregunta un turista de Islandia, país del bacalao invitado este año a la Festes de la Mercè. 

CUANDO NOS PONÍAMOS EL PAÑUELO KURDO

La hermana del informático lee en el móvil que ha sido suspendido el referéndum del pueblo kurdo en Irak.

Recuerdo que en los años 80 y 90, tanto en Barcelona como en Madrid y otras capitales, mucha gente se manifestaba a favor de la libertad del pueblo kurdo, a tal punto que incluso se puso de moda el pañuelo kurdo entre los jóvenes y los progres adultos y viejos de entonces, recuerda el poeta romántico del barrio.

¿Dónde estarán hoy?, pregunta la nieta del anarquista.
Pero, niña, ¿dónde quieres que estén?, ¡qué preguntas de hacer! Pues estarán en alguna asociación razonable y sensata, como debe ser, en contra de los referéndums que idean las malas personas, replica la cuñada del dentista.

Claro, nos hacemos mayores, recapacitamos y nos damos cuenta de todas las tonterías que hemos hecho en nuestra juventud, así debe ser, advierte la fiscal del barrio, que no es fiscal, sino vecina que fiscaliza en el bar.

En casa aún conservamos el pañuelo de mi abuelo, ¿no será falta o delito?, pregunta la nieta del anarquista.

Un novio que se hacía el revolucionario, le regaló a mi madre un pañuelo kurdo, ¡y ahora este exnovio tiene una tienda de productos eróticos en una zona turística!, exclama riendo la hija de la bibliotecaria.

¡Caramba con el novio!, apunta el humorista.
A mí también me regalaron uno de esos pañuelos, por mi santo, las compañeras del consultorio, indica la vidente del barrio.
Callen, callen y no armen más bulla, ¡ahora me salen con el pañuelo kurdo!, dice el politólogo del barrio.

¿Qué curre ahora, qué pasa con el crudo?, pregunta el periodista del barrio.

¡Marchando, otro carajillo!, avisa la dueña del bar. 

VOCES DE PROTESTA AL VIENTO, Y PARADOJAS DEL DESTINO

Gran manifestación, muchas voces de protesta en Bilbao a favor del referéndum, con el apoyo del PNV y otros partidos y sindicatos, lee la hermana del informático en Internet.

Rajoy depende de los votos del PNV para seguir en el laberinto del desgobierno que gobierna, indica el humorista del barrio.

¿No suena mal tanto registrar talleres de imprenta y redacciones de algunos periódicos y semanarios en busca de carteles, de material impreso sobre el referéndum?, pregunta la vidente del barrio.

Pues, señoras y señores, les comunico que don Mariano Rajoy, en la reunión de la junta directiva del PP catalán que se está celebrando en el Hotel Grand Marina, de Barcelona, ha sido muy aplaudido al anunciar la incautación de 100.000 carteles de propaganda del maldito referéndum, explica la cuñada del dentista.

¡Es lo que hay que hacer, registros y secuestros legales de papel peligroso, la ley es la ley, te guste o no, ya lo decía la Biblia!, advierte la fiscal del barrio, que no es fiscal, sino vecina que fiscaliza en el bar, como susurra siempre la dueña del bar, por si acaso.

¿No les suena a tiempos pasados ese ruido de aplausos por los registros e incautación de folletos y carteles?, pregunta la vidente del barrio.

"Temps passat, notícia d'avui" (Tiempo pasado, noticia de hoy) era un programa radiófonico estupendo sobre la historia de Catalunya, que lo hacían en Radio 4, de Barcelona, explica el politólogo del barrio.

No me venga con historias, el pasado es el pasado, replica la cuñada del dentista.

¿Pero usted, como católica, no cree en la resurrección?, pregunta la nieta del anarquista.

¡Todo es pecado y desacato! ¡No hay nada que hacer, son incorregibles!, responde la cuñada del dentista.

¿Saben?, estoy corrigiendo el primer volumen de mis memorias, anuncia el poeta romántico.

¡Vaya noticia, usted siempre tan oportunista!, como grita mi madre cuando machaca a sus novios, apunta la hija de la bibliotecaria.
¡Niña, un respeto a la canas del lírico!, replica el poeta.

Vale, vale, señoras y señores, por favor, haya aquí paz y después gloria, ¡que hoy es domingo, y marchando otra cerveza con berberechos!, exclama la dueña del bar. 
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ÚLTIMA NOTICIA: 
PARADOJAS DEL DESTINO (ENTRE PROFESIONALES Y VOLUNTARIOS ANDA LA COSA)

Según el diario El País: "La Policía busca voluntarios para desplazarse a Cataluña ante el referéndum."
Según el diario Ara: "El referèndum té 47.498 voluntaris. El Govern, que en necessitava 4.500, tanca el procés d'inscripció en considerar que ja són "més dels necessaris" (El referéndum tiene 47.498 voluntarios. El Govern, que necesitava 4.500, cierra el proceso de inscripción al considerar que ya se han inscrito más de los necesarios." 
Paradojas del destino y de los destinos.

¿ADÁN Y EVA TAMBIÉN ERAN, ADEMÁS DE PECADORES, CATALANES, DICE UNA LEYENDA?

Dice una leyenda oculta que Adán y Eva eran también, además de pecadores, presuntos catalanes que querían su propio jardín. Esto explicaría el dominio del mal en el mundo, comentan los historiadores de la Academia de Leyendas Ocultas.

Algunos, más escépticos, se preguntan: Si Adán y Eva fueron creados por Dios, ¿qué nacionalidad tendría Dios?

Sea como fuere, se impone la tesis hipotética de los historiadores académicos de leyendas ocultas, que afirman:

Aunque Dios hubiera tenido una nacionalidad, la que fuera, y en consecuencia Adán y Eva también hubieran tenido una antes de ser expulsados del Jardín del Edén, esto no invalida la hipótesis razonada, rigurosa, de que ambos, Adán y Eva, al ser tentados por la serpiente, esto es, por el Diablo, cayeran en pecado mortal y se convirtieran en presuntos catalanes que querían su propio jardín. Y de ahí, pues, el mal histórico, endémico (no nos referimos ahora al referéndum ni a la manía de votar) que vienen padeciendo la humanidad y sus pueblos y alcaldías desde tiempos inmemoriales.

Así pues, como dice un refrán de nuestra Academia: “De aquellos lodos, estos polvos”, o como dice otro, sin duda más obsceno: “De aquellos polvos, estos lodos".

Esto es lo que cuenta una leyenda.

CARTELES DE PROTESTA EN LAS PAREDES DE UN BARRIO

Dibujos de Franz Kafka

POR FIN, LLEGÓ LA CIVILIZACIÓN AL SIGLO XXI

¿Detención de alcaldes y otros representantes políticos de Catalunya?, pregunta el politólogo del barrio.

¿Que estamos en Venezuela, México o Uganda?, pregunta la sobrina de la peluquera.

¿Qué ocurre, qué pasa?, pregunta el tertuliano del barrio.

¡Mano dura, jarabe de palo!, la ley es la ley, como decían Moisés y los profetas nacional-católicos!, advierte la cuñada del dentista.

¡Por fin, alguien que habla con sensatez, cárcel y nada más que cárcel!. exclama un desconocido.

¡El esperpento, señores, el esperpento!, indica el humorista.

Dos imágenes de películas para hoy, Los Diez Mandamientos y El mundo está loco, loco, loco..., apunta la dueña del bar.

Las tablas de la ley en un mundo que está loco, sediento de poder, dinero, intolerancia y sangre, comenta el poeta romántico.
Bienvenidos al siglo XXI, dice la hermana del informático.
¿Pero qué ocurre?, pregunta siempre el novio de mi madre, que es cronista deportivo, bromea la hija de la bibliotecaria..
Nada, unos locos que hablan del Barça y el Real Madrid, dice un turista.

Ah, bueno, creía que era algo sobre los agujeros negros bancarios, entre Marte y Mercurio, contesta la nieta del anarquista.
Por fin, llegó la civilización al siglo XXI, anuncia la vidente del barrio.
¿Qué pasa?, pregunta otro turista. A mí nadie me estropea unas vacaciones, ni aquí ni en África, añade, sonriendo y tomándose un helado de fresa. 
¡Más de 700 alcaldes y otros políticos en los juzgados, qué barbaridad!, exclama la dueña del bar. 

POEMA INÉDITO DE CRISTINA PERI ROSSI

Giorgio de Chirico

                    IMITANDO A RONSARD

                           (“Quand tu serais bien vielle”)

Cuando seas una anciana solitaria

una tarde, rodeada de robots,

buscarás en el ordenador los versos

que un día dediqué a tu belleza

cuando eras joven y yo no

Y no los encontrarás porque el tiempo los habrá borrado

(hasta las nubes desaparecen sin dejar rastro)

Aprovecha hoy amada mía

antes de que la CIA china Putin Trump o Kim Jong

prohíban que las ancianas como yo

alaben tu belleza

antes que un robot

te haga el amor

con música electrónica

y juguetes de sex-shop.

Cristina Peri Rossi

UN CARAJILLO ESTOMACAL PARA LA DIGESTIÓN

La hermana del informático lee en el móvil la carta que ha recibido el director de TV3: "El TSJC pide a TV3 “no informar” de las actuaciones que permitan celebrar el referéndum."

¡Es todo tan demencial, que da, no miedo, sino terror de novela policiaca!, exclama la sobrina de la peluquera.
¡Ustedes se lo han buscado!, exclama la cuñada del dentista.
¿Nueva ley de censura?, pregunta un desconocido en el bar del barrio.

¡Nada de censuras, la ley es la ley, y punto!, advierte la fiscal del barrio, que no es fiscal, sino vecina que fiscaliza en el bar, susurra la dueña del bar, por si acaso...
¿Para eso tantos años de transición, para volver a caer en la censura en lugar de hacer política?, pregunta la vidente del barrio mientras se toma un carajillo estomacal, de "Aromes de Montserrat", un licor de hierbas, estomacales, informa la vidente a dos parejas de turistas que frecuentan el bar.

¿No estará prohibido también hacer un carajillo con "Aromes del Montserrat o de "Ron Pujol" (marcas auténticas, no de ficción)?, pregunta la dueña del bar, cargada de dudas y con incertidumbre de carajillo.

SUMA Y SIGUE..., A RITMO DE RUMBA CATALANA

Que si un millón de manifestantes, / que si más, / que si menos, / que si más, y olé!..., canta la nieta del anarquista en el bar del barrio, a ritmo de rumba catalana.

Algunos dando cifras ridículas: 250.000, canta el grupo de Sociedad Civil Catalana, que no, que ahora serán 350.000, canta el delegado del gobierno, que no, que no fue nadie, canta el de Badalona, en pleno desbarajuste de cifras, como si hubieran asistido a un concierto de la Pantoja en la Plaça Catalunya, canta la sobrina de la peluquera.

¿Por qué no defendemos el No en un referéndum limpio y claro si tan pocos son los del Sí, y acabamos de una vez?, canta la dueña del bar.

Porque la ley es la ley. como ya advertía Moisés y nos recuerda a diario nuestro PP y los palmeros de Ciudadanos, canta la cuñada del dentista.

Sí, señoras y señores, leyes inmutables, y no como esas del divorcio y matrimonios raros, canta la fiscal del barrio, que no es fiscal, sino vecina que fiscaliza en el bar.

Callo, y punto en boca, que si un referéndum es cosa de Dios y los Diez Mandamientos, aquí no hay rumba catalana ni madre que la parió, canta el humorista del barrio.
¿Qué ocurre, qué pasa, que hay tanto jaleo?, pregunta el periodista del barrio.

DESPUÉS DE LA MANIFESTACIÓN: GUERRA DE CIFRAS

Ahora, en lugar de hablar del problema, viene la guerra de cifras, dice el politólogo del barrio.

La Guardia Urbana y los diarios “La Vanguardia” y “El Periódico” hablan ya de 1.000.000 de personas en la manifestación de Barcelona, informa la hermana del informático

Pues mis amigos del grupo “Sociedad Civil Catalana” sostienen que sólo han ido unos 225.000, y el delegado del gobierno central ya da una cifra, 350.000, indica la cuñada del dentista.

¡Esto es rigor en las cifras, y no las exageraciones de tanto insumiso!, exclama la fiscal del barrio, que no es fiscal, sino vecina que fiscaliza en el bar.

Lo debieron ver de lejos, con el catalejo o los primáticos al revés, añade la hija de la bibliotecaria

Creo que había más de un millón de personas en la manifestación si contamos también todas aquellas que no podían llegar al lugar de la convocatoria y tenían que pararse en las calles adyacentes, como yo misma, así como un gran número de personas mayores que se veían obligadas a retirarse por el sol y buscar una sombra o un banco para sentarse, fatigadas. Y eso sin contar las pequeñas manifestaciones de otras poblaciones, comenta la sobrina de la peluquera.

¡No me creo nada, todo es manipulación!, grita airada la cuñada del dentista

Supongo que la COPE y otros medios dirán que no ha ido nadie, que todo es una ilusión, apunta la vidente del barrio.

Digan lo que digan, ha sido una manifestación multitudinaria, pacífica, ríos impresionantes de personas que bajaban de la Diagonal a la Plaça Catalunya, por las calles paralelas al lugar principal de la convocatoria, en la confluencia Passeig de Gràcia-Aragó, al que ya resultaba difícil acceder, explica la hermana del informático.

¡Todo es mentira y desacato, incluso en las cifras!, grita otra vez la cuñada del dentista.

Una idea: si fuera cierto que ha ido menos gente, podrían dejar hacer el referéndum para que ganara el No y acabaríamos con tanta historia, apunta el humorista del barrio.

“No pidas peras al olmo”, refranea el poeta romántico.

Este refrán: “No hay que pedir peras al olmo”, lo decía siempre mi madre, recuerda la dueña del bar.

¡La imaginación al poder!, exclamaba mi abuelo, añade la nieta del anarquista.

PANFLETO ENCONTRADO EN EL SUELO DEL BAR

La sobrina de la peluquera lee un panfleto que ha encontrado en el suelo del bar del barrio:

"Advierten algunas informaciones que se prohíbe terminantemente votar en casa según qué cosas.
Queda también prohibido hacer referéndums particulares en el jardín o en el patio trasero de las comunidades de vecinos.
Serán apercibidos muy seriamente quienes hablen en público sobre lo prohibido.

Agravándose la responsabilidad civil, y acaso redundando en responsabilidad penal, si además se habla de todo ello con cierto entusiasmo electoralista, para estimular el voto por calles, bares y escaleras."

Aquí acaba el panfleto, dice la sobrina de la peluquera.
Hoy, 11 de Septiembre, quien vaya a la manifestación a celebrar derrotas, caerá, si no en desacato, en pre-desacato, anuncia la cuñada del dentista.

¿Si voy a la playa, al campo de golf o al fútbol, me amparará la constitución de la playa, del golf o la federación de fútbol?, pregunta el humorista.

¡Alto, esto es una provocación!, advierte la fiscal del barrio, que no es fiscal, sino vecina que fiscaliza en el bar.

Nada es verdad, todo es mentira, todo es desacato, recita el poeta romántico del barrio.

Tengo más clientela desde que hay tanto jaleo nacional y pluri-nacional, comenta la vidente. Quieren que les adivine el futuro, comenta la vidente.

Cuenta una leyenda que los pájaros y las flores no supieron asociarse a tiempo, libre y sosegadamente, cuando convenía, y ahora andan a palos, cuenta la nieta del anarquista.
¡Por eso sube el precio de los alquileres y el aceite!, exclama la dueña del bar.

¿Qué ocurre?, pregunta el periodista del barrio.

¿AUTOBUSES MUNICIPALES DE BARCELONA QUE PREVARICAN?

¿Serán objeto de querella, perseguidos y detenidos los autobuses del transporte metropolitano de Barcelona? , pregunta la vidente en el bar del barrio.

La guardia civil registra la imprenta del pueblo de Constantí (Tarragona), y no encuentran ningún papel a favor del referéndum, dice la sobrina de la peluquera.

Mi madre, que tenía un novio ingles, me regaló una papeleta del referéndum de Escocia, ¿constituye delito guardarlo en casa?, pregunta la hija de la bibliotecaria.

¡Por supuesto, nada de referéndums en casa!, advierte la cuñada del dentista, y lo dice muy en serio, añade.

¡Así me gusta, contundencia proporcionada!, exclama la vecina que hace de fiscal en el bar.

Llegué por el camino del absurdo a la política, y por el camino de la política he llegado al absurdo, indica un tendero chino del barrio, que además es filósofo en sus escasas horas libres.

Esto es un esperpento, dice la dueña del bar.
O el teatro del absurdo, interpretado por autobuses que prevarican, comenta el humorista.

Es lo que el diario "El Mundo" ya publica: "Ciutadans y el PP piden la retirada de la campaña del transporte público". 
"¡Más madera, que es la guerra!", exclama Groucho Marx.

MIENTRAS TANTO..., ¡NI MILLONES NI HIJA DE DALÍ!

Fotografía: Dalí (Trinity Mirror / Mirrorpix / Alamy Foto De Archivo)

Mientras se discute con virulencia en Catalunya y ya se preparan miles de querellas contra el gobierno de la Generalitat, diputados, altos cargos y alcaldes catalanes favorables al referéndum, la extensión del gobierno del PP en el Banco de España hace saber que da por perdidos, por irrecuperables, 42.590 millones de dinero público de los 56.865 que aportó el Estado al rescate bancario, comentan en el bar del barrio.

¿Cómo puede soportar un país tantas corrupciones y engaños financieros, tantas querellas e imputaciones contra políticos elegidos en democracia y cuyo delito es, dicen, estar a favor de la celebración de un referéndum?, pregunta la vidente del barrio.

Habrá miles de querellados, dicen. ¡Qué barbaridad!, exclama la sobrina de la peluquera.

¡Y todo por un referéndum y no por los 42.590 millones de euros perdidos en el espacio sideral!, contesta la nieta del anarquista.
¿De qué estamos hablando, de democracia o de la gata gris de mi abuela que parió 48 gatitos rubios, 14 gatitos negros y 13 de blancos?, pregunta el humorista.

No estamos hablando de gatos, estamos hablando de lobos en la selva, poetiza el poeta romántico del barrio.

¡Y la hija de Dalí no es de Dalí!, exclama la hija de la bibliotecaria.
¡Todo es desacato, turismofobia y gamberrismo subversivo!, advierte la cuñada del dentista.

¡A mí, la legión!, grita la fiscal del barrio, que no es fiscal, sino una vecina que fiscaliza en el bar.

¡Cuidado, que viene el hombre lobo!, replica la dueña del bar.

Así pues, ¡el cadáver de Dalí no es el padre de la hija de Dalí!, exclama el periodista del barrio, ya alucinado y metido de lleno en el surrealismo hispano-catalán.