Foto: J.X.
Hoy, sábado, ha ido a visitarla.
El hombre del kiosco de las flores no estaba. Suele abrir sábados y domingos, pero como es verano debe estar de vacaciones.
En los jardincillos que hay dentro de la Isla II, ha cortado una rama seca, florida, y se la ha ofrecido a la novia muerta.
Más que un robo de flor, ha sido como un préstamo florido, un rapto de flor por un amor difunto.
Ariel Fridman
ResponderEliminarMireia Puertas
Raúl Yagüe Yagüe
Efi Cubero