Foto: J.X.
Entre
sombras, caminando de la mano del abandono, con la ausencia al lado,
flanqueados por los espíritus del bosque que nos custodian hasta el
lugar donde nos será revelado lo que no sabíamos y andábamos
buscando, entre las sombras, de la mano de la ausencia, con el
abandono al lado, el lado más triste del camino, ensombrecido por
las copas de unos árboles tan altos que no dejan ver sino un pequeño
fragmento de cielo, por el que entra y sale una bandada de
golondrinas, vistas desde abajo, desde el abandono, respirando un
largo y hondo silencio.
Muy hermoso, Albert. Un poema (así lo siento yo) admirable.
ResponderEliminarEduardo.
No sé què dir. Estic emocionada després de llegir una i altra vegada aquestes paraules, aquestes idees, aquests sentiments que donen forma a un poema tan extraordinari.
ResponderEliminarUn abrazo.
ResponderEliminarSalut