Si todo son problemas, ¿de qué se ríen los políticos cuando salen al escenario?, preguntan en el barrio.
Si salimos de un problema para entrar en otro, si salimos de una crisis para entrar en otra, si salimos de una guerra para ir a otra, si vamos de un problema a otro sin poder descansar, ¿de qué se ríen?
¿A qué viene tanta risa? ¿Se ríen de sus propias payasadas, ellos, ellas, los políticos que salen al escenario y se ríen?
¿Acaso hemos perdido todos la razón, y estamos encerrados en el jardín de un gran psiquiátrico mundial?
"Otros ni siquiera están en el jardín, o sea que no te quejes", dice uno de los vigilantes nocturnos, esos vigilantes que día y noche bailan con los que se ríen en el escenario.
¿Es todo una gran broma, una inmensa risotada?
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