miércoles, 20 de febrero de 2013

ÚLTIMAS NOTICIAS SOBRE ESPIONAJE

Dicen que algunos poetas, resentidos (no explican la causa del resentimiento), han encargado a una agencia de detectives que investiguen la vida y la obra de otros poetas. 
Al parecer, más de un poeta ha decidido dejar colgado a su editor (¿justicia poética?) y salir corriendo hacia tierras desconocidas, donde dicen que la poesía fluye y no es un asunto de detectives.
Otros poetas, en cambio, han preferido seguir perfeccionando sus odas al amor (a la vecina, al vecino, a la peluquera, al cartero), pero haciendo acopio de metáforas neoclásicas o neomodernistas, y substituyendo o tergiversando las dedicatorias.
Es deseable y recomendable, dicen los más entendidos, que la sangre poética no llegue al río. 

18 comentarios:

  1. comentarios en Facebook20 de febrero de 2013, 15:15

    A Lurdes Fidalgo, Alma Libre y Desamparados Blay Alabarta les gusta esto.

    Universitario dijo...
    Justicia Poética
    Thomas Rymer acuñó la expresión “poetic justice” en su “The tragedies of the last age considered” (1678) para describir cómo una obra debería inspirar el comportamiento moral por medio del triunfo del bien sobre el mal. De manera que, aunque en la vida real no siempre se hace efectiva la verdadera justicia, en la literatura es posible conseguirla.
    La imaginación y la ficción son elementos esenciales para el Derecho y los juristas. La inteligencia profunda requiere de pasión y emoción. El proceso del Derecho requiere de estos elementos que surgen del interior y que lo enriquecen.
    https://poemsinlaw.blogs.uv.es

    Derecho y Literatura
    poemsinlaw.blogs.uv.es:
    Ante las puertas de la ley hay un guardián. Un campesino se presenta frente a este guardián, y solicita que le permita entrar en la Ley. Pero el guardián contesta que por ahora no puede dejarlo entrar. El hombre reflexiona y pregunta si más tarde lo dejarán entrar.
    Hace 11 minutos · Me gusta · Eliminar Vista Previa

    Justicia poética:
    La justicia poética no es tanto un tema como una técnica literaria, por la que se consigue un final feliz, en el que la virtud y el honor de los buenos recibe su recompensa y el vicio y el comportamiento deshonroso de los malos su castigo, que puede ser incluso inverso al de la justicia penal ordinaria (El delincuente honrado), que, incluso suponiendo la rectitud de los que la imparten, desde el punto de vista poético está contaminada por consideraciones prosaicas. De ese modo se consigue la resolución de la tensión dramática mantenida durante el transcurso de la novela o la obra dramática y, a satisfacción del gusto mayoritario, se satisface la pretensión del público lector o auditorio, que espera una catarsis o experiencia interior purificadora, de liberación de las pasiones, explotada por los autores desde la tragedia griega. El efecto contrario se consigue con un final abierto. La parodia de estos finales se busca en las astracanadas, donde muere hasta el apuntador (La venganza de Don Mendo)./
    Wikipedia
    Hace unos segundos · Me gusta

    Javier Mesa: Para Kafka la justicia, aparentemente, no solo no era poética, ni siquiera era imaginable.
    Hace unos segundos · Me gusta

    ResponderEliminar
  2. fundamentalista de la poesía26 de febrero de 2013, 13:05

    Eso es intolerable, burlarse así de los poeta enamorados. Dedíquese a otra cosa si le molesta la poesía.

    ResponderEliminar
  3. asociación de poetas arrepentidos de ser poetas26 de febrero de 2013, 13:09

    ¿Qué es justicia poética?, preguntan los poetas que no tienen a nadie que les escriba y patrocine sus poemarios.

    ResponderEliminar
  4. la nieta del anarquista26 de febrero de 2013, 13:10

    Siempre dando la lata y el verso quejica.

    ResponderEliminar
  5. peluquero de sonetos26 de febrero de 2013, 13:11

    A más de uno se le va a caer el pelo poético.

    ResponderEliminar
  6. cantante de nanas y bibliotecaria26 de febrero de 2013, 13:13

    Dime con qué poeta andas y te diré quién eres.

    ResponderEliminar
  7. Cuando despertó, aún no habían terminado de leer los 45 poetas de aquel acto.

    ResponderEliminar
  8. experta en utopías fracasadas26 de febrero de 2013, 13:17

    No ponga a un poeta en su vida y salga corriendo antes de que sea demasiado tarde.

    ResponderEliminar
  9. Ya lo dice el refrán: Hoy por mí y mañana por mí.

    ResponderEliminar
  10. editor situacionista26 de febrero de 2013, 13:22

    ¿Eres poeta? Si te he visto, no me acuerdo ni te ubico.

    ResponderEliminar
  11. agente literario postmoderno26 de febrero de 2013, 13:23

    Se prohíbe la entrada a poetas y cosas semejantes.

    ResponderEliminar
  12. nieto de Juan de Mairena26 de febrero de 2013, 13:25

    Hoy buscarás en vano tu libro en la librería.

    ResponderEliminar
  13. La guillotina es para los poetas, perdón, para los poemarios.

    ResponderEliminar
  14. local para vivos y vivas y detectives26 de febrero de 2013, 13:31

    Se reserva el derecho de admisión.
    Poetas abstenerse.

    ResponderEliminar
  15. En el barrio hay un vecino que corrompe a los poetas con las vecinas.

    ResponderEliminar
  16. El bar El Loto Dorado exige rectificación:
    El corruptor no es un vecino cualquiera, un prosaico, sino un rimador que ganó la Flor Natural Marchita. Nuestra clientela es selecta.

    ResponderEliminar
  17. Menos bromistas y más poesía.

    ResponderEliminar
  18. Lo tengo en la punta de la lengua..., otro soneto.

    ResponderEliminar

Nota: solo los miembros de este blog pueden publicar comentarios.