viernes, 18 de diciembre de 2009

NO FUE EN VANO

Balthus, Mujer joven en un parque





















la vanguardia.es
Clinton celebra el retorno de Haidar
La secretaria de Estado norteamericana, Hillary Clinton, celebró el retorno de Aminatu Haidar a El Aaiún, aunque recordó que situaciones como la vivida en el último mes no hacen sino poner de manifiesto "la urgencia de encontrar una solución permanente para el conflicto en el Sáhara Occidental". Clinton afirmó que el gesto de Marruecos "es un reflejo del verdadero espíritu y la generosidad del pueblo y el Gobierno marroquíes". De cara a encontrar una "solución permanente" al conflicto territorial en el Sáhara Occidental, la jefa de la diplomacia estadounidense se sumó a la petición ya lanzada por el secretario general de Naciones Unidas, Ban Ki Moon, para que se produzca una nueva ronda de negociaciones "tan pronto como sea posible". "También quiero expresar mi rotundo apoyo para el enviado personal (de la ONU) Christopher Ross y sus esfuerzos para lograr una solución", agregó.

Nota
La huelga de hambre de Haidar no ha sido en vano, ha tenido sentido, pese al riego mortal de la activista, de la luchadora. Y a pesar también del lío político, de los malentendidos deliberados, de la confusión generada desde un principio, con la intención de presentar a la activista política como una esposa y madre que se ha extraviado, que sólo va en busca de una vivienda digna para la familia (como dijeron y le propusieron algunos en el parking del aeropuerto).
Intentaban así desvirtuar, "banalizar" el sentido y la función política de su acción en nombre del pueblo saharaui. Sólo al final el gobierno español ha sabido reaccionar llamando a las cosas por su nombre, y asumiendo la responsabilidad de España en el conflicto político del "Sáhara ex-español" con Marruecos. Esperemos que ahora, después de treinta años de abandono, se lleve a cabo el referéndum de autodeterminación del pueblo saharaui.

El suplente del cronista

5 comentarios:

albert tugues dijo...

La lección de Gandhi, bien aprendida, es magnífica cuando sale bien, sin que muera nadie, como en el caso de Haidar: esto es la no-violencia, en cuya acción sólo se expone quien la hace, sin matar a los demás en su lucha. Los gobiernos, aunque sólo sea por vergüenza, no pueden dejar morir a una activista como Haidar, y el conflicto político olvidado, soterrado, vuelve a la actualidad. Y es de esperar que se intentará resolverlo, por miedo a otra vergüenza pública o desvergüenza política nacional e internacional.

Pacifista (hasta cierto punto)

© José A. Socorro-Noray dijo...

Por supuesto que no fue en vano, el problema está en que en este siglo XXI ya no estamos acostumbrados desgraciadamente a que haya personas que luchan por sus ideales y por la defensa a ultranza de los derechos humanos. Estamos inmersos en un mundo competitivo que sólo ensalza el individualismo y economicismo. Sin embargo, a pesar de todo, todavía hay luces, como la de Aminetu Haidar, en este universo tan oscuro.

Ahora es tiempo de felicitarnos y estar de fiesta por el regreso de Aminetu a El Aaiún con sus hijos y el resto de su familia, pero no podemos olvidar que esta tragedia comenzó con una auténtica tropelía de Marruecos, pisoteando los Tratados Internacionales y la Carta de los Derechos Humanos, y lo que es peor aún con la complicidad o brazos caídos, es lo mismo, de España. Mañana será el día de exigirle a nuestro gobierno que actitudes tan execrables, como la expulsión de Aminetu Haidar, no se pueden ni se deben volver a consentir. Ya no vale mirar hacia otro lado ni esconder la cabeza bajo el ala por temor a romper el equilibrio y la "amistad" con un país que se empeña en empantanar y ahogar las resoluciones de la Naciones Unidas. España tiene la obligación moral e histórica de contribuir firme, enérgica y asertivamente a solucionar el confllicto del Sáhara Occidental porque, recordémoslo una vez más, fue nuestro país quien lo creo abandonando y regalando el dicho territorio. Es hora, pues, de ponerse las pilas y hacer justicia reparando todos los errores.


Un cordial saludo

ratadebiblioteca dijo...

Lamento ir contra corriente, pero se ha hablado más de la falta de libertades en Marruecos que de la situación de los saharauis. ¿Quién se acordará de ellos, o de Haidar, dentro de tres meses, cuando los medios de comunicación dejen de hablar de ella? ¿Qué habrá conseguido con su sacrificio? Que me lo cuenten cuando ocurra.Y al fin y al cabo fue ella quien al final pidió que la llevaran a un hospital. O sea que en realidad no estaba dispuesta a morir, aunque utilizara a sus hijos como excusa. Y a España no le interesa estar a malas con Marruecos.
No se puede comparar esta situación con la de Gandhi. Las circunstancias eran muy diferentes.
Y una huelga de hambre no deja de ser una forma pacífica de violencia.
Prefiero el estilo de Nawar el-Saadawi, la disidente egipcia que lleva años luchando pero con la palabra, y con sus más de 70 años recorre el mundo defendiendo sus ideas. A los interesados en el tema os recomiendo todos sus libros, pero en especial "Memorias de la cárcel de mujeres", que escribió en la cárcel con la ración diaria de papel higiénico que le proporcionaban sus compañeras y un trozo de lápiz que una de ellas le consiguió, porque a las presas políticas les estaba prohibido el papel y el lápiz. Tuve la suerte de conocerla personalmente en un congreso de escritores y traductores, y lo que más me impresionó fue su sencillez y la fuerza de sus palabras. Estas son las armas con las que lleva muchos años luchando, sin dramatismos ni espectáculos. No sé si consigue algo de tipo práctico, pero sí da a conocer la situación de Egipto, de la que nadie se preocupa. ¿Qué hará ahora Haidar para defender su causa?
Y que conste que estoy en contra de la situación de los saharauis y de toda forma de injusticia, como tantísimos casos hay en el mundo. Pero lamentablemente a los políticos lo que menos les importa es la persona, el ser humano. Todo se reduce a intereses. En este sentido estamos como en la Edad Media. Sólo que ahora utilizamos más la diplomacia que la barbarie.

Nadal dijo...

La bomba "mediatica" Haidar, desactivada.
Los señores que se han de repartir los fosfatos, pueden ir pasando a la trastienda para reanudar, tranquilamente, sus trapicheos.

Lo siento pero así lo intuyo y así lo digo.

albert tugues dijo...

También es muy importante la lucha que mantiene la disidente egipcia, por supuesto. Pero no por eso hay que negar otras formas de lucha. ¿A quién perjudica físicamente una huelga de hambre? Sólo a quien la hace. Y en el campo de la acción política no se puede pedir menos violencia: es no-violencia en el sentido de que no ejerce violencia física contra los demás, ni siquiera contra el enemigo que sea. En cuanto a Gandhi, recordar que cuando empezó su lucha era un desconocido, un hindú que había estudiado en Londres. Sólo más tarde se convirtió en un símbolo mundial, y él fue el primero o uno de los primeros que instauró la huelga de hambre como acción política. Recordar también que Haidar ya era conocida en su tierra y en las cárceles marroquíes. Éramos nosotros, los occidentales, quienes no la conocíamos. A partir de hoy es el nuevo símbolo de la lucha por la libertad del pueblo saharaui. Y el mundo lo ha reconocido así. Esperemos que el Frente Polisario sepa comprenderlo así y colabore con ella. De momento, todos los gobiernos occidentales han dicho que hay que resolver de una vez por todas el conflicto saharaui.

Un habitante de la ex-metrópoli del Sáhara, España